Page 70 - Impreso

FROM THE MIND OF
PATEK PHILIPPE REF. 5370P-011
El color azul de la precisión
Siempre hay mucho que decir
de un reloj Patek Philippe, y más si es un cronógrafo rattrapante, considerado una de las tres complicaciones más difíciles de realizar, junto a la repetición
de minutos y el tourbillon. Por tratarse de esta Manufactura,
no le será difícil imaginar que ya tenía relojes de pulsera de este tipo desde 1923. El modelo que
le presento en esta ocasión se lanzó en 2015 como la Ref. 5370, con una caja de platino 950 y una carátula de esmalte negro. Como era lógico esperar, fue muy bien recibido entre los entusiastas de la marca, que unos años después creó la Ref. 5370P-011.
La caja también es de platino 950, como se merece una pieza
tan especial, y mide
41 milímetros. La diferencia con su antecesor es que la placa de oro de 18 quilates de la carátula ha sido decorada con esmalte Grand Feu de color azul, una de las tantas técnicas artesanales que Patek Philippe domina a
la perfección. Como es normal para esta Casa, la belleza y la legibilidad son inseparables. Por ello, las hermosas agujas “hoja” y las cifras aplicadas Breguet son de oro blanco y tienen un revestimiento luminiscente.
La escala taquimétrica, la del contador de 30 minutos y la
del pequeño segundero, están impresas en blanco para que contrasten con el fondo azul. Además, la aguja central del cronógrafo y la rattrapante
están hechas en acero arenado y rodiado, por lo que son muy fáciles de seguir.
Su movimiento es el calibre CHR 29-535 PS manual, que, como a mí, lo hipnotizará
cada vez que lo vea. Tiene dos pulsadores para las tres funciones del cronógrafo y un pulsador integrado en la corona para la rattrapante. Le garantiza un mínimo de 65 horas de reserva de marcha con el cronógrafo parado. Por si no lo sabía, todos los relojes Patek Philippe de platino tienen un diamante engastado entre las asas de la pulsera, a las 6 horas. Estos detalles son otra razón
por la que admiramos tanto a la Manufactura de Ginebra.
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