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32 WATCHES WORLD
NEW PIECES
LA NUEVA VERSIÓN
de un vintage
...................... La simbiosis entre un estilo vintage y un
espíritu contemporáneo, es como se resume la esencia de la colección Speedmaster Chronoscope de Omega. Un reloj que capta la riqueza de la tradición.
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Un clásico tiene un motivo por el cual se considera dentro de esta categoría: atemporalidad. Permanecer en el deseo de los coleccionistas no es sencillo cuando existe una producción anual de más de 30 millones de relojes, solo en Suiza. Para las marcas relojeras, lograr posicionarse entre los gustos más exigentes no es tarea fácil, mucho menos hacer reinterpretaciones de sus modelos más emblemáticos.
Omega lo sabe hacer, toda vez que domina el arte
de poner sus piezas a múltiples escalas. Su inspiración es su propia historia. Ejemplo de ello es el nacimiento del modelo Chronoscope. La palabra “cronoscopio” se deriva de las raíces griegas Chronos (tiempo) y Scope (observar), siendo la capacidad de un reloj para realizar varias mediciones de un evento.
El cronoscopio es una herramienta que, en su origen, era confiable para el gremio médico y los militares,
ya que les ayudaba a tomar lecturas más precisas. La historia de Omega con el Chronoscope inicia en 1885, cuando su fundador, Louis Brandt, presentó el primer reloj de bolsillo con cronoscopio.