Ebel lanza su nuevo Sport Classic 29 mm White Silver. Hablamos en Ginebra con Flavio Pellegrini, Presidente de Ebel, para conocer los secretos de una firma que ha convertido la colección Sport Classic en icono de sus creaciones. Un icono sport-chic reinventado.
Icono “sport-chic”
Sport Classic 29 mm White Silver celebra la esencia de la belleza femenina. La caja hexagonal de acero se complementa con un brazalete de confortables eslabones ondulados, ejemplo de la belleza y funcionalidad que caracterizan a la histórica firma suiza.
El lanzamiento de la innovadora línea Sport Classic a finales de los 70, con su inimitable brazalete “wave” y su caja totalmente integrada, representó el nacimiento de la categoría “sport-chic” en Ebel.
Excelencia técnica y pasión por el diseño
Una firma que nació en 1911 tiene muchas historias por contar. El triunfo de Boris Becker en Wimbledon (1985) con un Ebel en la muñeca sería actualmente un trending-topic en las redes sociales de la cultura relojera. Flavio Pellegrini, CEO de la firma suiza, nos recibe en Ginebra para explicarnos el éxito de su colección Sport Classic y los planes de trabajo de una firma al alza.
Watches World: ¿Cuál es el reloj más icónico de Ebel?
Flavio Pellegrini: El reloj icónico lo tenemos en la colección Sport Classic que se lanzó en 1977. Y lo más icónico es el brazalete, que tiene estos elementos ondulados, es muy delgado y muy cómodo. Por eso el nombre era Sport Classic, un aspecto clásico pero con brazalete deportivo. Y tienes que entender lo que significa cuando hablamos de brazalete deportivo, era un reloj que fue usado por Boris Becker, quien ganó Wimbledon con este reloj en su muñeca, o Andre Agassi, Gabriela Sabatini, entre otros. Fue una forma bastante innovadora de tener un brazalete metálico utilizado por jugadores de golf o tenistas. Además, también su caja es única, es un diseño hexagonal exacto donde puedes ver que hay 5 tornillos, totalmente funcionales para fijar el bisel en la caja, no es un truco estético. Sport Classic también fue usado por actores famosos, como Don Johnson mientras conducía su Ferrari en la serie Miami Vice.
WW: Sport Classic presenta versiones para hombre y mujer.
FP: Era un producto muy versátil que se podía usar de manera deportiva, pero también muy clásico con el traje y un toque muy elegante. Lo relanzamos 40 años después en 2017, cuando celebramos el cuarto aniversario de este reloj; hoy representa más del 60% de nuestras ventas, por lo que ha sido muy bien aceptado de inmediato. La mayoría de nuestras referencias son de este reloj, que tiene otra cualidad: funciona bien para caballeros y damas, una cualidad que no se da en toda la industria.
WW: ¿Es Ebel actualmente una marca más femenina? ¿Fabrican piezas de cuarzo y movimientos automáticos también?
FP: Vendemos muchos más productos para mujeres y las mujeres están menos interesadas en los movimientos automáticos, ya sabes, les gusta ponerse el reloj y que esté en hora. Diría que el 10% de nuestros relojes son automáticos mientras que el 90% son de cuarzo, así que básicamente nos centramos en las damas. Hay firmas como Rolex, que lo es todo, o también Cartier, Omega, que están en un rango más alto de precio, pero nosotros nos encontramos en un espacio agradable donde jugamos y tenemos esta personalidad con piezas de damas.
WW: ¿En qué rango de precios se mueve Ebel?
FP: El rango de precios en el que te mueves ronda los 2,000 usd, el precio de entrada, y sube hasta los 7,000, dependiendo del tamaño. Volviendo a nuestro icono, funciona muy bien la versión en acero y oro. Alrededor del 70 % de nuestras ventas son de productos de oro, por lo que también es un elemento muy único. Es una tendencia, también el oro amarillo, en el pasado era más oro rosa, pero ahora ha vuelto al oro amarillo, que siempre ha sido el ADN de este reloj, incluso en los años 70.
WW: Los valores de Ebel se basan en diseño y funcionalidad. ¿Cómo ha evolucionado la firma desde su origen?
FP: Estamos usando la misma innovación y la misma voluntad de tener algo que sea atemporal y bien pensado, donde la forma tiene que seguir la función, el principio del diseño, como nuestra Villa Turque, en La Chaux-de-Fonds, creada por Le Corbusier. Con la forma de estas pulseras, podemos pensar que se trata de algo que es simplemente agradable a la vista, pero es también muy funcional, por ello la pulsera es muy cómoda, así que ahí está el vínculo y el ADN de Ebel.
WW: Con tantos personajes conocidos que usaron la marca, ¿tienen a alguna personalidad o embajador ahora?
FP: Es algo que funcionaba bien en el pasado cuando la gente buscaba un embajador, ese modelo soñado. Hoy en día, la gente no está mirando esto, creo que necesitan comprender realmente cuál es el valor de la historia de la marca y tenemos una gran historia y gran valor. Tendremos que impulsar más nuestro marketing y gastar más en esa dirección, tanto en ir con un embajador, tal vez influencers, amigos de la marca, etc. Gisele Bündchen fue la última gran embajadora en 2006. Probablemente no sea la mejor manera para nosotros de recuperar la confianza.
Fotos de A. Martinelli
WW: ¿Qué papel juega ahora Villa Turque para Ebel?
FP: Es nuestro centro de relaciones públicas. Hacemos eventos, invitamos a los periodistas. Es una casa con ocho habitaciones privadas, como un hotel, e incluso lo usamos para nuestras reuniones internas, especialmente con diseñadores, cuando tenemos que traer al diseñador para aportar la atmósfera apropiada. Es muy importante para nosotros, nos gustaría usarlo más, deberíamos usarlo más, pero es un edificio protegido, así que lo usamos con cuidado.
WW: ¿Cuáles son los mercados más importantes para la firma?
FP: Nos estamos enfocando principalmente en Europa y Medio Oriente, ahora estamos planeando una expansión, pero no aún porque hemos gastado mucha energía. Probablemente el mercado de EE. UU pueda ser un gran mercado para nosotros, no estamos muy presentes, pero allí tuvimos mucho éxito en el pasado. Tenemos que dar un paso adelante.
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