El relojero y el reloj: la turbina 2023 de IWC * Watches World

Este mes Watches World pudo platicar con quien empezó de “aprendiz” dentro del gran tanque de pensamiento que es la Manufactura de IWC, dentro de ese lugar que nos entrega innovación, investigación, desarrollo y soluciones que cada año sorprenden en su relojería.

Imagínese poder estudiar ahí, pero ahora imagínese que quien estuvo ahí creció, aprovechó, se dedicó y ofreció a IWC todos sus conocimientos y creatividad, así fue como ahora la Manufactura presenta el segundo reloj con una turbina a las 12 horas que además gira conforme al tourbillón que está debajo de ella.

Me refiero a Markus Bühler, de quien recobro sus principales palabras en este texto. Hablamos de todo el mundo que le ha rodeado, pero recobro principalmente sus ideas para la creación de su nuevo reloj.

Markus Bühler y su exitosa historia de vida

Guillermo Lira (GL): Markus, muchas gracias por acompañarnos. Lo saludamos desde la Ciudad de México. Soy Guillermo Lira de Watches World. Agradezco a todo el equipo que hizo posible este encuentro. Gracias por su tiempo, Markus.

Primero quisiera felicitarlo por el reloj. ¡Es un gran reloj! Creo que es una pieza que a cualquier coleccionista le encantaría tener. Siendo aficionado de los relojes, ¿cuál es su reloj favorito de IWC?

Markus Bühler (MB): No debería decirle que es el reloj Markus Bühler; sin embargo, no tengo un reloj que prefiera sobre los demás. En la mayoría de los segmentos, tenemos relojes absolutamente adorables. Por ejemplo, me gusta mucho el Reloj de Aviador Cronógrafo en Ceratanium, ya que muestra nuestras capacidades en cuanto a materiales y contiene el calibre 69, un movimiento de fabricación propia de IWC, del cual estoy muy orgulloso.

Eso se debe a que en los últimos 10 años hemos trabajado arduamente en nuestros movimientos de fabricación interna. Si llego a ver el Reloj de Aviador Cronógrafo en Ceratanium en alguna vitrina, siento un gran orgullo porque esta pieza muestra lo que hemos logrado en la última década.

Además, soy un gran admirador del Gran Reloj de Aviador Calendario Perpetuo, calibre 52, porque es un gran movimiento. Cuando salió, yo era un aprendiz en 2001, y, como aprendices, teníamos la oportunidad de trabajar en el calibre 51. Esto fue antes de que saliera el calibre 52. Al tener este gran movimiento sobre la mesa por primera vez, se veía tan complicado, tenía dos o tres veces más piezas en comparación con un movimiento estándar. Estaba muy impresionado. Adicionalmente, el calendario perpetuo le otorga una elegancia absoluta. Sin duda, es uno de los íconos más destacados de IWC.

Su movimiento favorito

MB: Sí, pero hay otro movimiento. Creo que uno de los movimientos más geniales que tenemos es este Cronógrafo Monopulsador con calibre 59.

Tiene una bonita historia, porque es bastante complicado crear un Cronógrafo Monopulsador, considerando su mecanismo único. No puedes copiarlo, ni desarrollarlo desde cero en términos de diseño el cual ya existe. Además, cuenta con un contador de 30 minutos.

Al principio, puede que no suene tan especial, pero si tienes que contar el doble de minutos, necesitas el doble de espacio en esta rueda. Lograr esta disposición no fue sencillo, nos llevó meses y meses. Implicó varios prototipos hasta que conseguimos este contador de minutos, al igual que con todos los movimientos. No fue fácil alcanzar la calidad que buscábamos.

Estos movimientos son los que más me gustan, ya que me permiten recordar más allá de los buenos y los malos momentos durante el desarrollo de los proyectos.

GL: Bueno, volvemos al reloj original que creó, ¿qué se le pasó por la mente y qué quería conseguir? ¿Qué tan difícil fue? ¿Qué tan decidido estaba para conseguir lo que quería?

MB: Primero, debe saber que este reloj fue el resultado de una competencia en 2003. Cuando era el aprendiz de relojero en IWC, había un concurso en el que todos los aprendices de relojería podían participar. El tema consistía en abrir la zona del movimiento de un reloj y mostrar el muelle espiral y crear un nuevo diseño o idea a partir de nuestra imaginación.

El primer reloj no fue el resultado del concurso. Solo fue el movimiento. Resultó ser una tarea extremadamente difícil de alcanzar. Después me di cuenta de que el barrilete es uno de los motores del movimiento y gira solo unas pocas veces al día. Es un motor muy lento. Por otro lado, uno de los motores más rápidos que conozco es la turbina de un avión. La turbina gira unas 150 veces por minuto.

Entonces empecé a pensar en combinar estos dos motores, que estaban en ambos extremos de la escala de velocidad y así es como surgió la idea de abrir el barrilete y darle forma a todas las partes de la turbina. Así fue como presenté mi creación en este concurso.

Si ve el reloj y le da cuerda, en el movimiento, la turbina comienza a girar porque es parte de la rueda. Así es como tuve suerte de ganar este concurso. El antiguo CEO sugirió que creáramos 10 relojes a partir de esta idea. Posteriormente, duplicamos la turbina en la parte frontal del Gran Reloj de Aviador. Elegimos el Gran Reloj de Aviador porque el movimiento de la competencia encajaba perfectamente en este tamaño de la caja. Después de esto, el principal desafío fue crear un segundo indicador con suficiente luz, que el movimiento pudiera impulsar. Esa es la historia de la primera edición.

GL: Gracias, Markus. Bueno, mencionaste el premio y también el concepto del aprendiz. Quiero centrarme en esto. ¿Qué se siente el haber sido aprendiz y ahora tener un reloj que lleva tu nombre? Es un reloj icónico. ¿Cómo te sientes al respecto?

MB: Es un gran honor para mí. Cuando comencé como aprendiz, tenía 28 años. La relojería no fue mi primera profesión. Empecé como carpintero, construyendo casas de madera. Después de 10 años, decidí cambiar a algo diferente, quería dedicarme a algo que me apasionara. Tenía la idea de que el trabajo no debía sentirse como trabajo, sino como una aventura. La relojería era sin duda la mejor opción para mi carrera y para mi forma de pensar.

Cuando comencé y gané este concurso, e hicimos 10 relojes a partir de mi idea, nunca pensé que esto se convertiría en un reloj icónico. Pero luego, después de 10 años, creo que en 2018 me invitaron a Hong Kong para conocer a todos los propietarios de la primera edición. En ese momento, pensé que era una historia interminable.

En su momento, sentí que solo era una serie de 10 relojes que se crearon. Pero después de dos o tres años, se había convertido en un tema recurrente y me enfrenté a preguntas al respecto. Empecé a entender la importancia del tema un poco mejor. Pensé que tal vez el reloj era realmente un ícono. Sin embargo, cuando era aprendiz, nunca pensé que se convertiría en un reloj que llevaría mi nombre.

Me hace sentir orgulloso, pero mi mamá está aún más orgullosa porque mi primera experiencia como aprendiz no tuvo tanto éxito. No obstante, ella siempre tenía la esperanza de que encontraría mi camino.

Tener un reloj con tu nombre

GL: Bueno, no sé si lo sabes, pero he trabajado 25 años como periodista de relojes. Solo hay unos pocos relojes que llevan nombres de personas, lo cual representa el trabajo, antes de nada, en el movimiento, y, por supuesto, en el reloj. ¡Felicidades! Sin duda, en este siglo este reloj será una página muy destacada en el libro de IWC.

¿Cuáles fueron los desafíos para crear el nuevo reloj? No he visto el reloj. Tengo algunas preguntas, pero quizás la vea algún día en Suiza. Una de mis preguntas es: ¿Quería hacer la turbina de avión en el segundero pequeño? ¿Se pueden desvincular? No he visto la turbina. Coméntanos sobre los retos.

MB: Hace tres años, debido a que había muchas solicitudes, tomamos la decisión de considerar una nueva edición. Estaba claro desde el principio que solo nos enfocábamos en el diseño característico de la turbina. Pero queríamos cambiar todo lo demás.

Queríamos hacer la segunda edición más lujosa y de mayor gama. Decidimos optar por un tourbillon, porque se encajaba perfectamente con los elementos del diseño de la turbina. Pero no fue muy fácil implementar este tema de la turbina en un tourbillon, porque éste depende mucho del peso. El tourbillon gira una vez por minuto. Por eso preguntas por el segundo indicador. El punto rojo de la turbina te muestra el segundo indicador. Por eso elegimos el calibre 82905. Es una combinación perfecta.

Puedes jalar de la corona y el tourbillon se detendrá mediante un mecanismo muy complicado. Así, puedes ajustar la hora con la misma precisión que en un reloj normal de tres manecillas. Pero es un tourbillon. Puedes verlo debajo de las palas de la turbina, pero tienes que mirar dos veces.

Realmente queríamos crear algo muy lujoso, pero que solo se notara en una segunda mirada. La primera dificultad era que el tourbillon gira una vez por minuto, pero no de manera constante. Avanza y se detiene ocho veces por segundo.

Puedes imaginar que el peso o la inercia son muy importantes para el tourbillon. Lo debes tener en cuenta, porque si comparas un camión y un coche desde el punto de vista de frenar y acelerar, es mucho más fácil hacerlo en un coche que en un cambión.

En el caso del tourbillon, es exactamente lo mismo. Por esta razón, elegimos un material muy ligero, rígido y absolutamente robusto. Optamos por la aleación de titanio de grado 5, la cual es altamente resistente y fuerte, pero es muy difícil de producir.

Por lo tanto, durante el proceso de producción que es completamente interno, fue realmente un gran desafío encontrar la solución adecuada para el proceso de fresado, así como la estrategia correcta para todas las piezas de mecanismo.

Al final, pulimos a mano cada una de las 12 minúsculas palas, lo cual no es tan sencillo. Al principio, intenté pulir las primeras turbinas yo mismo junto con la persona encargada del pulido, lo cual es una buena historia.

Cuando creé la primera edición, tuvimos que hacer unas decoraciones con esta persona. En conjunto, desarrollamos los procesos para el acabado de la primera edición. En esta ocasión, nos sentamos en la misma mesa y desarrollamos el acabado para la segunda edición. Es una linda historia, porque casi 20 años después, seguimos aquí y continuamos igual de apasionados por hacer un esfuerzo adicional para crear esta pieza de lujo.

Guillermo Lira: Dado el extenso proceso de desarrollo, fabricación de materiales, pulido y demás, ¿cree que podría convertirse en un icono y tal vez implementarse en otros relojes?

Markus Bühler: Es difícil de responder. Es decir, elegimos una limitación muy baja por razones específicas. La primera razón es que queremos que sea excepcional y raro. No puedes incorporar este elemento en todos los relojes, porque entonces perdería su estatus de ícono. Por eso lo hacemos raro al fabricar solo 51 relojes.

En segundo lugar, debido a que es tan difícil de producir y ensamblar para los relojeros, solo hay unas pocas personas altamente cualificadas que pueden producir y ensamblar estos relojes. No podemos optar por un número realmente alto de movimientos o relojes de esta forma.

GL: Bien, platícanos un poco de tu trabajo diario o de tus desafíos diarios. ¿Cuáles son los movimientos o complicaciones mecánicas que quieres lograr y que aún no has alcanzado?

Creo que no se trata tanto de una complicación que quiera lograr o implementar en nuestro proceso de producción. Mi enfoque principal es avanzar paso a paso en una dirección conocida y perfeccionar funciones específicas e icónicas de IWC. No se trata de ser lo más complicado posible. Lo que haces debe apoyar tu ADN. Por ejemplo, el sistema de cuerda Pellaton es un excelente ejemplo de esto.

En 2001 empezamos con la remodelación del sistema de cuerda Pellaton, porque los movimientos actuales son diferentes a los de los años sesenta. Nos vimos obligados a reinventar el sistema. En cada intento, buscamos mejorar. Utilizamos piezas cerámicas, optimizamos todos los procesos y la forma de las piezas hasta llegar a un sistema muy robusto y perfeccionado.

Es un sistema altamente eficiente en comparación con uno simple. Creo que estas son las metas que quiero lograr: elementos muy robustos y específicos que reflejen las funcionalidades distintivas de IWC.

GL: ¿Cómo percibe a IWC en este momento? Ya cuentan con muchos elementos, como el calendario perpetuo, los tourbillones, entre otros. Se requiere un grupo de expertos pensando en lo que vendrá en el futuro, no solo pensando en un nuevo icono, sino también en los materiales, formas y movimientos. ¿Qué opina de todas estas máquinas de producción e innovación? ¿Hacia dónde va dentro de IWC?

Una empresa líder en innovación

MB: Creo que somos muy innovadores. Toda la empresa tiene la capacidad de innovar y es parte integral del proceso de innovación. Si me toma como ejemplo, tuve la oportunidad de ser creativo y desarrollar un reloj propio. Lo mismo ocurre con los nuevos aprendices que tenemos. En cuanto al desafío de la innovación dentro de IWC, tratamos de involucrar a todas las personas para que puedan plasmar todas las ideas que tenían en los últimos años.

Algunas de las ideas que surgen son absolutamente brillantes. Cuando apunté algunas de estas ideas, pensé: “Oh, ¡Dios mío! ¿Por qué no fui yo quien tuvo esta idea? Quizás estoy demasiado inmerso en el movimiento del reloj”. Tal vez estoy un poco cegado ante las nuevas ideas. Cuando tienes todos los relojes alrededor, tiendes a estar en poco limitado por el tema.

Pero los aprendices, el personal de finanzas, incluso los chicos de TI son completamente libres y tienen muchas nuevas ideas. Así que el proceso de innovación en IWC está realmente a la vanguardia, en mi opinión.

GL: Has sido aprendiz. Has estado desarrollando movimientos y has estado compitiendo. ¿Cuál es el futuro de la relojería mecánica? ¿Hacia dónde crees que se avanzará la relojería mecánica en el futuro? Has estado trabajando en talleres, con las escuelas. Si no me equivoco, hemos observado una crisis de especialistas relojeros. ¿Qué crees que pasará con la industria relojera en los próximos 10 a 20 años, tal vez en para el 2050?

MB: Creo que nadie sabe lo que nos depara el año 2050, pero si tuviera la oportunidad de participar en la creación de ese año, desearía fervientemente que la industria relojera, o la artesanía relojera se convierta cada vez más en un arte.

El cambio al que nos enfrentamos hoy es que deseamos crear más valor en un reloj existente. Eso implica que debemos implementar más artesanía y más relojería artística. Debemos desarrollar un arte y no solo producir una artesanía. Si observas un movimiento de complicación, como un calendario perpetuo, un tourbillon o un repetidor de minutos, es una obra de arte, no solo una máquina.

Considero que es importante brindar a los jóvenes no solo la oportunidad de ser relojeros en la mesa y ensamblar productos estándar, sino también darles la posibilidad de convertirse en artistas, porque entonces descubriremos los talentos y las personas adecuadas para la relojería del futuro.

Esta entrevista fue posible gracias a todo el equipo de comunicación en coordinación con Suiza y México, a la disposición del entrevistado para hablar de su reloj y su vida. Gracias a IWC empresa por hacerlo posible.

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