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70 WATCHES WORLD
Homenaje a la pasión de
Vacheron Constantin
El modelo American 1921 Pièce unique de Vacheron Constantin, no es más que una declaración de fascinación por los oficios artesanos relojeros que se guardan en los archivos históricos de la marca. ................................................................................
La recreación de esta pieza es a lo que yo le llamaría un ambicioso proyecto que tiene el planteamiento claro de revalorizar la relojería tradicional; sí, ésa que se llevaba a cabo en los crudos inviernos en los valles de Suiza y que sigue siendo el pilar de lo que ahora vemos en cada reloj.
Vacheron Constantin pensó en la reproducción de un modelo de los
años 20, el cual justo este año cumple 100 años desde su lanzamiento: hablo del American 1921. Contarle el largo camino con obstáculos y soluciones
que el Taller de Restauración de la
Casa y el departamento de Patrimonio tuvieron que atravesar, supondría escribir no menos de 10 páginas sobre este ejemplar. Acostumbrados a códigos técnicos y estéticos extremadamente altos, Vacheron Constantin goza de un lugar respetado en la Alta Relojería; sus 265 años de producción ininterrumpida son apreciados por los coleccionistas y exigentes amantes de los relojes.
El American 1921 Pièce unique es idéntico al modelo original. Imagine la producción en los talleres de hace 100 años, completamente diferente a lo que sucede en las manufacturas de hoy en día, con procesos automatizados para lograr una producción más robusta.
Y, salvo en piezas muy especiales, apreciamos trabajos casi artesanales
en su totalidad. Lograr esta pieza única fue una proeza técnica y humana,
de excelencia artesanal que rebasó cualquier límite. Fue aprender y entender el proceso de la construcción de un
reloj de hace un siglo, un mágico viaje
al pasado inmerso en un lugar con 800 máquinas-herramienta y, claro, archivos que guardan la historia de la marca. Gracias a los departamentos
de Patrimonio y Restauración, este reloj fue posible, el cual seguramente ya es el más deseado por coleccionistas.
No solo es la recreación, sino también la ejecución de relojeros y artesanos. Adaptar herramientas, utilizar las existentes y crear nuevas fue uno de tantos retos; reconstruir un calibre
de época desde cero y discernir el ensamble de 115 componentes que constituían el modelo original, fue otra proeza técnica.
La apuesta no se centró únicamente
en el corazón del reloj. La parte exterior, incluyendo la caja, la carátula y las manecillas, fue elaborada de manera individual para ser fiel a los documentos de archivo. La caja, por ejemplo, se recreó por completo, incluso el tono en
oro amarillo 3N de 18 quilates. La carátula, que ostenta la delicada técnica en esmalte Grand Feu, requirió horas en horno para lograr un acabado idéntico.
Si bien solo se fabricaron 24 piezas
de la referencia fechada en 1921, en la actualidad únicamente una de ellas forma parte de la colección privada
de Vacheron Constantin, lo que lo convierte en un reloj extremadamente raro y codiciado por los coleccionistas y conocedores de relojes. El estilo classic with a twist de Vacheron Constantin, transmite el respeto por un patrimonio relojero, la experiencia y la celebración de un icono de la relojería.