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From the mind of...
Breguet Tourbillon Extra-Plat Squelette 5395
Luis Peyrelongue
Queridos lectores de Watches World, es un placer encontrarnos nuevamente a través de esta edición y celebrar 220 años de la patente del tourbillon, solicitada por Abraham-Louis Breguet, quien cambiaría la historia de la relojería el 26 de junio de 1801.
El tourbillon continúa explorando nuevos límites, y de ellos se desprende el ultraplanismo. En tendencia desde hace una década, los tourbillones extraplanos han sido materia de Casas relojeras tan importantes como Vacheron Constantin, Jaeger- LeCoultre y Bvlgari. Sin embargo, Breguet lleva la delantera en este dispositivo por obvias razones.
En 2013 la firma presentó el Classique Tourbillon Extra-Plat Automatique 5377, y en 2017 lanzó la referencia 5367, que montaba el calibre 581 de 3 mm de grosor que da vida a esta referencia. Sin embargo, el total de la esbeltez de la pieza de 7.7 mm de espesor y 41 mm de diámetro, ofrece una reser- va de marcha de 80 horas y cuenta con una espiral de silicio, rueda de escape y áncora en este mismo material. Con ello se logra un peso total de 0,290 gramos. Por primera vez se pre- senta íntegramente esqueletizado para brindar una interpreta- ción contemporánea de esta técnica ancestral. La platina y los puentes de oro están calados, de manera que revelan la anatomía mecánica del movimiento.
La dificultad máxima de la esqueletización consiste en retirar la mayor cantidad posible de materia, conservando a la vez las
propiedades técnicas de los distintos componentes. Se trata de una verdadera complicación relojera adicional, aún más arries- gada por la elección del oro. El movimiento destaca también por la peculiaridad de sus acabados y sus decoraciones fuera de serie; empezando por el guilloché de las pocas superficies restan- tes de la platina. El motivo clous de Paris está aquí realizado con diamante, un método que aporta un brillo particular a la obra, pero que no tolera ninguna imprecisión. Una intervención tal en este tipo de piezas, constituye una primicia para Breguet. En cuanto a las aristas vivas, están pacientemente achaflanadas con una lima hasta obtener un bisel de 45° perfectamente liso y re- gular. Por otra parte, las distintas inscripciones y los bordes que rodean los orificios implican un importante trabajo de grabado realizado a mano
Visto desde el lado de la carátula, la jaula y la rueda de balan- ce del tourbillon se encuentran entre las 4 y las 6 horas, con el barril principal entre las 12 y las 2 horas. El tren de engranajes y el muelle real son totalmente visibles gracias a un magnífico trabajo de esqueletado. El tren en marcha desciende ligeramen- te a la izquierda de la línea media, desde el muelle principal hasta la jaula del tourbillon. Asimismo, los engranajes visibles entre las 9 y las 12 horas son el tren de cuerda automática, que se hace evidente de inmediato cuando se mira el reloj desde la parte posterior.
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