En 2023, Breguet desplegó las inmensas alas de su historia y su prestigio con el lanzamiento de la cuarta generación del Type XX, su emblemático reloj de aviador. Está conformada por dos piezas: el Type 20 Chronographe 2057, con un legado militar, y el Type XX Chronographe 2067, inspirado por algunos de los modelos civiles más importantes. Ambos son dignos herederos de uno de los grandes linajes de esta categoría relojera tan apreciada por entusiastas y coleccionistas.
Estos relojes se basan en piezas de las décadas de 1950 y 1960, pero, al mismo tiempo, son indiscutiblemente contemporáneos. Como dice Emmanuel Breguet, descendiente del legendario relojero Abraham-Louis Breguet y director de patrimonio de la Casa: “Aquellos que estén familiarizados con la historia de Breguet saben que, en vez de ceñirse a imitar el pasado, la Maison prefiere una interpretación de éste combinada con innovaciones contemporáneas”.
Breguet voltea al cielo
Los nuevos Type 20 Chronographe 2057 y Type XX Chronographe 2067 son el capítulo más reciente de una historia que empezó a principios del siglo pasado, cuando pilotos destacados adquirieron relojes Breguet. La Casa entendió la importancia que la medición precisa del tiempo tendría para la aviación, igual que en el siglo XIX había comprendido su relevancia para la navegación marítima.
Según la cronología compartida por la marca, los productos “especiales” de Breguet aumentaron a partir de la década de 1930. Eran instrumentos adaptados a las condiciones del entorno aeronáutico, como cronómetros de aeródromo de 19 líneas en caja de plata antimagnética; cronógrafos contadores de ratrapante; pequeños cronómetros de a bordo de 24 líneas con caja termoaislante, termostato e iluminación; siderómetros, etcétera. Se entregaban tanto a la aviación militar como a la joven compañía aérea Air France. Simultáneamente, Breguet produjo cada vez más relojes de pulsera con cronógrafo.
“Tras la incuestionable audacia de sus creaciones Art Déco en los años 20 y 30, la Maison se lanzó a un campo que se convertiría en una de sus especialidades: la cronografía de la industria aeronáutica”, explica Lionel a Marca, CEO de Montres Breguet.
Nace un icono
Por ello, cuando en la década de 1950, el Ejército del Aire francés buscaba equipar a sus pilotos con un cronógrafo de pulsera al que el Ministerio del Aire llamó Type XX, Breguet compitió y obtuvo contratos, al igual que otras empresas. Los requisitos del reloj eran que contara con una carátula negra con números y agujas luminiscentes; un movimiento de alta calidad resistente a los cambios de presión y aceleración; un bisel giratorio, y función de flyback, entre otros. Las marcas seleccionadas podían vender el mismo producto a clientes privados. Así nacieron los Type XX militares y los Type XX civiles.
Los prototipos presentados por Breguet en 1952 fueron aprobados en 1953 por el Service Technique Aéronautique. En 1954, el Ejército del Aire francés le hizo un pedido de 1,100 Type 20 militares. El Centre d’ Essais en Vol (Centro de Ensayos en Vuelo), que reunía a la élite de los pilotos de pruebas, pidió 80 piezas. En 1958, la Marina francesa encargó 500 relojes para los pilotos y marineros de su cuerpo aéreo, la Aéronautique Navale, que recibió en 1960. Con estos clientes, la reputación del Type XX de Breguet se extendió más allá del mundo militar y se prolongó hasta las generaciones siguientes del reloj.
Los relojes de 2023
El nuevo Type 20 Chronographe 2057 se basa en los 1,100 ejemplares entregados al Ejército del Aire francés entre 1955 y 1959. Esos relojes eran los únicos que se identificaban con el 20 en lugar del XX. La carátula negra tiene un contador de 30 minutos a las 3, que ahora es más grande que el contador de 60 segundos a las 9. Se ha añadido una ventana de fecha a las 4:30. La caja de 42 mm en acero está coronada con un bisel bidireccional acanalado. La corona retoma la forma de pera original. Las cifras arábigas y el triángulo del bisel son luminiscentes y tienen un tono verde menta, al igual que las agujas.
Por otro lado, el Type XX Chronographe 2067 se inspira en los más destacados Type XX civiles de las décadas de 1950 y 1960, sobre todo en el modelo 2988 de 1957. La carátula negra tiene un contador de 15 minutos a las 3, uno de 12 horas a las 6 y un pequeño segundero a las 9, que son de distinto tamaño. Las cifras arábigas, las agujas y el triángulo del bisel están revestidos con material luminiscente color marfil. La fecha está presente a las 4:30 horas. Como en el otro modelo, la caja mide 42 mm y es de acero, pero el bisel bidireccional acanalado está graduado. Además, la corona tiene una forma recta.
Algo importante es que cuentan con un sistema de intercambio rápido de correas, que permite sustituir la pulsera de piel de becerro por la de tela NATO negra. Ambas se incluyen en el original estuche de piel color habana, que evoca el perfil de un ala de avión.
La versión civil está equipada con el nuevo calibre 728 y la militar con el 7281, ambos cronógrafos flyback automáticos. A Breguet le tomó cuatro años desarrollar estos movimientos protegidos por varias patentes, con rueda de pilares, embrague vertical, frecuencia de 5 Hz y un innovador sistema de puesta a cero, además de espiral, rueda de escape y asas del áncora de silicio. Tienen una reserva de marcha de 60 horas y están más que listos para volar.
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