El nuevo Luminor Tre Gorni de Panerai combina magistralmente las características más clásicas de la Casa con innovaciones técnicas en un reloj que materializa elegancia y vanguardia en una pieza.
Cuando el diseño italiano y la precisión suiza se unen, el resultado no puede ser menos que impecable, y Panerai ha dado cuenta de ello desde que estableció su nueva manufactura en Neuchâtel, Suiza, hace más de 10 años. Esta Maison, fundada en 1860 en Florencia, Italia, por Giovanni Panerai, funcionó desde su apertura como taller, tienda e incluso como escuela de relojería, y ya desde entonces empezó su largo y fructífero camino en la innovación tanto en tecnología como en materiales.
Su primer paso contundente fue el desarrollo de una pasta autoluminescente creada a partir de un polvo a base de radio que aumentaba el brillo de los instrumentos utilizados por los marinos de la Armada Real italiana al que bautizaron como Radiomir y constituyó la primera patente documentada de Panerai.
Con una innegable vocación marítima, tanto el diseño como las innovaciones técnicas de todas las creaciones de Panerai, están influenciadas por la practicidad y la funcionalidad, conservando la elegancia y sobriedad que siempre los ha distinguido. Para celebrar esta tradición de más de 160 años, llega el nuevo Luminor Tre Giorni PAM01628, que reúne en una sola pieza la tradición y la modernidad a través de una precisa combinación de texturas y acabados. Al admirar esta nueva pieza es casi imposible ignorar las reminiscencias a uno de los modelos más icónicos de Panerai: el Radiomir.
Para empezar, cuenta con una caja de 47 mm, que es reflejo de su tradición de servir a los submarinistas de la armada italiana que necesitaban de una herramienta de gran diámetro que les permitiera optimizar la legibilidad durante las misiones militares. La caja esta patinada a mano para reducir los destellos de la pieza al tiempo que le da un aspecto vintage, ese que muestran los objetos que han estado casi siempre a nuestro lado. El bisel, el puente, la palanca y la hebilla son también de acero y muestran una combinación de pátina y cepillado que acentúan sus detalles, su carácter robusto y refinado.
La carátula, aunque se integra sin esfuerzo a la caja, tiene su propia personalidad que obtiene principalmente a través de la estructura “sándwich”, una de las geniales creaciones de esta Maison, utilizada por primera vez en el Radiomir, lanzado en la década de los 40, y que integraba tres discos, el inferior recubierto de la sustancia luminosa homónima y el superior perforado para que a través de las perforaciones la brillantez fuera más intensa aun en las condiciones lumínicas más adversas, y un tercer disco que unía a los otros dos.
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En este nuevo modelo se utilizan solo dos discos: uno superior perforado de acabado granulado que se va degradando del gris al negro, y otro inferior que actualmente se recubre con Super-LumiNova, al igual que las manecillas que presumen un atractivo color beige que armoniza todo el conjunto.
Este rotundo exterior resguarda un calibre P.3000 de manufactura, 100% de Panerai, utilizado por primera vez en 2011. Es un movimiento funcional y estéticamente impecable como se puede ver a través de sus puentes abiertos que no dejan duda de sus capacidades. El mecanismo de cuerda manual le otorga una reserva de marcha de hasta tres días, es hermético hasta 100 metros y cuenta con una correa de piel de becerro y otra de caucho negro.
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