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FROM THE MIND OF
Máxima elegancia
Patrimony fase lunar y fecha retrógrada
Cuando alguien me pregunta qué reloj considero el epítome de la elegancia, me vienen varios ejemplos a la mente. Uno es el Patrimony fase lunar y fecha retrógrada de Vacheron Constantin. Los modelos de la colección Patrimony se inspiran en las piezas que la Maison hacía en los años 1950. Tienen un estilo depurado y minimalista, y apuestan por lo esencial y por la armonía de las proporciones.
De este reloj en particular, me gusta mucho la combinación de complicaciones y la forma en que han sido colocadas en la carátula. Las fases lunares están a las 6 h, graduadas de
0 a 29, lo que permite contar
los días transcurridos desde la última luna nueva. A esto se le conoce como edad de la Luna
y corresponde al ciclo real del cuerpo celeste. Su precisión es tal que solo necesita una corrección cada 122 años.
La complicación de fecha retrógrada mediante una aguja central con punta de flecha se encuentra en la parte superior. Las indicaciones retrógradas son un sello de Vacheron Constantin, que empezó a usarlas en los
años veinte, cuando reinaba la estética art déco. Una indicación es retrógrada cuando el indicador no da una vuelta completa a
la carátula, sino que cubre su segmento de medición y vuelve
a su punto de partida para empezar de nuevo.
Un punto importante del Patrimony fase lunar y fecha retrógrada, es que todos los ajustes se hacen con la corona. Además, su mecanismo, el calibre 2460 R31L de la manufactura, es automático y tiene una reserva de marcha de hasta 40 horas. La caja de 42.5 mm de diámetro está hecha en oro rosa de 18 quilates. La carátula es inmaculadamente blanca, con índices y cuentas
de oro. Se acompaña de una correa de piel de alligator Mississippiensis marrón oscuro y está reconocido con el Punzón de Ginebra. Perfectamente elegante, ¿no le parece?
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