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Philippe Alluard
Permanecer150añosfielalespírituqueledioorigen,noes una tarea sencilla. Sin embargo,TAG Heuer lo ha conseguido a base de innovación, creatividad y el indiscutible talento de sus ingenieros: las 82 patentes que ostenta la marca lo demuestran.
Watch Words
Guillermo Lira/Maribel Zavala
En opinión de Philippe Alluard, Presidente de LVMH Watch and Jewelry Latin America, la obsesión por la precisión extrema le ha permitido a TAG Heuer abrirse paso entre las firmas relojeras y reinventar progresivamente los tres principios elementales de la relojería: energía, transmisión y regulación.
Prueba de lo anterior es el Concepto Pendular TAG Heuer, el primer movimiento mecánico de la historia sin espiral, con el que la marca conmemora su 150 aniversario y del que Alluard se siente muy orgulloso: “En el desarrollo del Pendulum, los ingenieros concentraron sus esfuerzos en superar las limitaciones de diseño inherentes al sistema de regulación tradicional, ya que el espiral fue reemplazado por un muelle invisible o virtual derivado de imanes que generan un campo magnético constante durante décadas. Además, lograron que el movimiento construido con este revolucionario oscilador se mantuviera ciento por ciento mecánico, ya que no contiene elementos ni accionadores electrónicos”, destacó.
Otra de las maravillas del concepto, que late a 43,200 a/h, es el periodo oscilante resistente a los cambios producidos por fuerzas perturbadoras, cualidad que lo convierte en un dispositivo cronométrico excepcionalmente preciso: “Aún no podemos comercializarlo porque enfrentamos desafíos técnicos para mantener la estabilidad en la regulación, y el sistema todavía es sensible a los cambios de temperatura. Una vez resueltos, ya no será un concepto, sino un nuevo hito en la tecnología del regulador mecánico”, precisó el responsable de TAG Heuer en la región.
Tradición en innovación relojera
Al igual que lo hiciera en Basilea 2004, cuando presentó el prototipo del Monaco V4 -modelo que vio la luz a finales del año pasado en una edición limitada a 150 piezas de platino- con el Concepto Pendular, TAG Heuer reinventa tres siglos de tradición relojera: “Hay un gran debate sobre la validez de la innovación y de la manufactura, hay marcas que se autoproclaman de manufactura y presentan
novedades, mientras que otras están más involucradas en la búsqueda fundamental. TAG Heuer es una marca que investiga y desarrolla innovaciones -como el oscilante o la corona de cuerda- que han modificado el mundo de la relojería”, destacó el entrevistado.
Sin revelar lo que presentarán en Basilea 2011, Alluard afirmó que la relojera suiza tiene muy claros los aspectos en los que trabajará: “En las formas, materiales y complicaciones. En la integración de varias novedades dentro de un mismo reloj”. Además, añadió que seguirán trabajando en el desarrollo de ediciones limitadas enfocadas a eventos locales, ya que las considera una tendencia de mercado interesante.
México, mercado clave
Para Philippe Alluard, el consumo de relojes en nuestro país se está sofisticando: “Hace 15 años el consumo era muy clásico, pues se basaba en marcas históricas de relojería. Sin embargo, en los últimos 10 años se despertó el interés de los mexicanos y coleccionistas por la relojería. Compraban en Nueva York, Los Ángeles, Houston, Londres, París, pero no tanto en México. Asimismo, la baja de los impuestos en el 2007 fue de gran ayuda, porque nos hizo enfocarnos hacia este mercado”, comentó el ejecutivo de TAG Heuer, quien radica en Estados Unidos desde 1988.
En cuanto a los puntos de venta en nuestro país, Alluard se refiere a ellos como una “evolución total”, pues: “La distribución se centra en dos puntos fundamentales: el joyero de alto nivel y las tiendas departamentales, que han registrado un fuerte aumento”. Destacó el hecho de que en un año tan difícil como el 2010, TAG Heuer haya prevendido en el país más de 170 piezas de la edición limitada del Carrera. Sin duda, un volumen de venta importante que tiene más que satisfecho a Phillipe Alluard: “Todo esto huele muy bien”, concluyó entre risas.
TAG Heuer reinventa progresivamente los tres principios elementales de la relojería: energía, transmisión y regulación.
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