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Con su diseño moderno y tecnológico, el BR-X5 está pensado para los exploradores del tiempo y del futuro.
carga automática, avalado con el certificado de cronometría COSC, una primicia para Bell & Ross.
Fieles al principio de la Bauhaus de que la función define el diseño, Bell & Ross utiliza una caja de
41 mm de diámetro en acero inoxidable construida alrededor de un contenedor estanco, que sirve como núcleo central para proteger el mecanismo. La construcción multicapa de la caja es muy interesante. Además del contenedor, tiene dos placas de acero que forman la parte superior y el fondo,
a las que se fijan el bisel cuadrado
y los cristales de zafiro de ambos lados. Se mantiene hermética mediante cuatro tornillos que la atraviesan por cuatro columnas
que refuerzan la solidez de la construcción.
Disponible en una carátula negra y otra azul glacial, ambas
con efecto sol, ofrece una lectura optimizada gracias a los largos índices metálicos aplicados con un contorno rodiado y el uso de Super- LumiNova. Otro atractivo del BR-X5 son sus funciones. A las 9 h tiene un indicador de reserva de marcha en forma de círculo y dividido en tres tercios. Y a las 3 h hay una gran apertura con el fechador.
Los acabados pulidos, satinados
y microgranallados enriquecen
la personalidad de este reloj multifacético. La nueva identidad visual se complementa con un brazalete de acero integrado muy cómodo o con una correa de caucho a juego con la carátula. Cualquiera de las configuraciones es una excelente opción para una pieza que vuelve a demostrar la madurez y el excelente gusto de Bell & Ross.
Alberto Gutiérrez
WATCHES WORLD 37