Reine de Naples: Breguet reinventa la elegancia femenina en su 250 aniversario
Breguet celebra 250 años con las nuevas Reine de Naples 9935 y 8925, relojes que fusionan arte, técnica y elegancia en la alta relojería femenina.
En el marco de su 250 aniversario, Breguet rinde homenaje a su historia con dos nuevas referencias de la emblemática colección Reine de Naples: 9935 y 8925, disponibles en Peyrelongue Chronos. Dos creaciones que reafirman la visión femenina de la relojería, conjugando técnica, arte y emoción en un equilibrio tan sutil como impecable.
Reine de Naples y el legado de Caroline Murat
Inspirada en el reloj que Abraham-Louis Breguet creó entre 1810 y 1812 para Caroline Murat, reina de Nápoles y hermana de Napoleón I, la colección Reine de Naples se erige como un ícono de elegancia femenina. Aquella pieza, considerada el primer reloj de pulsera de la historia, marcó una revolución en la relojería y selló para siempre el vínculo entre Breguet y la mujer contemporánea.

Reine de Naples 9935: la pureza del tiempo
El nuevo Reine de Naples 9935 es el primer modelo 100% femenino concebido para celebrar el aniversario de la Manufactura. Cada pieza lleva grabada la mención “Breguet 250 Years”, símbolo de su exclusividad.
En esta referencia, la marca apuesta por una lectura depurada del tiempo. Desaparece la reserva de marcha para otorgar protagonismo a la fase lunar, ahora de dimensiones ampliadas. Horas, minutos, pequeño segundero y Luna: la esencia misma de la relojería, concentrada en una composición de pureza y encanto.




Su carátula de cristal de aventurina azul, con reflejos de cobre y una base de nácar de Tahití, genera un efecto nocturno y onírico. La luna, ligeramente abombada y realizada en nácar blanco, parece flotar sobre un cielo estrellado. En su interior, una firma secreta –visible solo bajo cierta luz– confirma la complicidad entre la pieza y su dueña.
Por primera vez, Breguet introduce el oro Breguet en la caja y el brazalete, con un engaste nieve central que inspira el diseño de los eslabones. El brazalete, flexible y totalmente ajustable, puede adaptarse con precisión milimétrica y se integra con un cierre invisible, ejemplo de la maestría artesanal de la Maison.

Reine de Naples 8925: minimalismo con alma
La segunda novedad, Reine de Naples 8925, rinde tributo al lenguaje estético creado por Abraham-Louis Breguet a finales del siglo XVIII: claridad, proporción y legibilidad.

Su bisel engastado con 41 diamantes acentúa el carácter joyero de una pieza que muestra únicamente horas y minutos, dejando que la simplicidad hable por sí misma. Se presenta en tres variantes: una en nácar extra blanco con números árabes dorados, otra en oro Breguet con acabado satinado tipo rayos de sol, y una tercera en laca negra con aventurina. Todas coronadas con un diamante talla pera a las 12 horas, como firma luminosa de la colección.



El arte del guilloché y la herencia francesa
En el reverso, las nuevas referencias exhiben una masa oscilante decorada con un motivo “Petit Trianon” guilloché a mano, creado especialmente para esta línea. Inspirado en los jardines de Versalles y en el legado artístico de la realeza francesa, este detalle reafirma la conexión entre Breguet, la historia y el arte relojero.
Sin duda, las nuevas Reine de Naples 9935 y 8925 son mucho más que relojes: son la expresión contemporánea de un linaje que transformó la relojería femenina en arte.
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Rita Segura
Comunicóloga especializada en medios impresos y electrónicos. Escribir me apasiona tanto como la alta relojería con su preciso y encantador tic-tac.
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