Si bien la relojería tradicional jamás dejará de ser atractiva, es decir, las líneas fuertes y con carácter de un Roma, o de un Diagono permanecerán en el gusto de los coleccionistas, los diferentes materiales y tratamientos responden a una tendencia dictada por la sociedad, pero magistralmente ejecutada por los diseñadores que han definido la moda y el estilo en los últimos 60 años, los italianos.
Octo Ultranero
El octágono representa un número de la suerte en diferentes culturas, pero además es el cuerpo geométrico perfecto para atraer las miradas y replicar el carácter de quien lo porta. Es un hombre, y no un niño aquel que porta un reloj con dichas características; un alto ejecutivo, un actor protagónico, un deportista destacado, que domina el paso del tiempo, al menos el que exhibe en el pulso…
Las nuevas referencias Ultranero forman parte del epítome del lujo y el urbanismo reinterpretado a partir de la clase y el buen gusto, brindando un acento italiano en cada línea y con cada decisión tomada con respecto a la estética de la pieza. Octo nació como una leyenda, y rápidamente se posicionó en el top of mind de los hombres que desean ser reconocidos. Por tal razón, este 2016 Bvlgari lanza un tratamiento DLC como recubrimiento del cuerpo de acero y titanio de sus Octo.
Del total de las configuraciones de movimiento encontradas en la línea lanzada en 2012: Solotempo, Velocissimo, Finissimo Tourbillon, solamente éste último está desarrollado en caja de titanio, amplificando el nuevo carácter del torbellino más esbelto de la industria relojera: Bvlgari Octo Ultranero Finissimo Tourbillon, cuyo perfil es de –apenas– 1.95 mm de diámetro, todo un hito para la mecánica relojera.
Su nombre explica las siglas Diamond Like Carbon, un material que recubre la estructura, ofreciendo con ello nuevas garantías de dureza y permanencia con el paso del tiempo. Olvídese de las rayaduras en su pieza de alta relojería, o de que el color negro pierda brillo o belleza, el DLC entrega la dureza del diamante a su estética.
Octo Ultranero Finissimo Tourbillon
El calibre fue desarrollado en la Manufactura, y hace uso de un sistema de rodameitno de bolas a fin de garantizar la rotación del torbellino volante a medida de una vuelta por minuto. El motor lleva por nombre BVL 268, mide 32.6 mm de diámetro y entrega 52 horas de autonomía, además de presentar acabados de alta relojería Côtes de Genève.
Octo Ultranero Solotempo
Como su nombre lo dice, la belleza de las horas y minutos se expresa bajo la estética “oscura” del tratamiento DLC. Pero en esta ocasión, es el motor BVL 193 de remonte automático el que da vida a la indicación del tiempo.
Octo Velocissimo
Veloz, de alta frecuencia, el corazón de esta belleza vibra a 5 Hz durante, no menos, de 50 horas de autonomía. Vive en a una caja de acero inoxidable con tratamiento DLC y diámetro de 41 mm. Asimismo, el ritmo de la pieza es determinado por un escape de silicio de alta tecnología, el cual optimiza los recursos energéticos y maximiza la precisión de la pieza. Este reloj posee destellos de oro rosa de 18 quilates en el bisel y la corona.
