Perrelet presenta la nueva generación de cronógrafos Turbine Chrono Neo
Perrelet lanza una nueva generación de cronógrafos. Tras presentar complicaciones como el tourbillon y el propio cronógrafo previamente, presenta tres nuevas versiones con interesantes mejoras técnicas y estéticas. Turbine Chrono Neo es una pieza deportiva que invita al dinamismo de la vida moderna y llega en colores rojo, verde y azul.



Robusta caja de titanio
Perrelet Turbine Chrono Neo presenta una caja de titanio que combina acabados pulidos y cepillados, que recuerda al Turbine EVO, la pieza que marcó la renovación de la colección en 2019 para celebrar el décimo aniversario de Turbine. El diámetro del nuevo cronógrafo se ha reducido a 42 mm y la pieza cuenta con hermeticidad a 50 metros. En el bisel, se muestra la escala taquimétrica y exhibe un recubrimiento DLC negro, al igual que los dos pulsadores del cronógrafo.

La caja de este Perrelet Turbine Chrono Neo presenta el centro del cuerpo con anchas ranuras. La pieza viste un brazalete de titanio con cinco filas de eslabones donde también constrasta el pulido con el cepillado. Viene con una correa adicional de caucho a juego con el color de las esferas inferiores, que puede colocarse fácilmente sin herramientas gracias a un sistema de “quick release”.




Cronógrafo sin parangón
Lo más destacado es que el nuevo Perrelet Turbine Chrono Neo no es un cronógrafo al uso con los clásicos subcontadores. Sigue manteniendo su diseño de turbina con las 12 palas y la medición de tiempo se lee gracias a dos agujas centrales para los contadores de 60 segundos y 60 minutos con agujas centrales —esta última con la punta triangular rellena de Super-LumiNova®—; también muestra la fecha en la apertura situada a las 6 horas.
Su calibre automático P-361, compuesto por 175 piezas, está dotado de un volante que late a una frecuencia de 28,800 alternancias por hora (4 Hz) y está protegido contra los choques accidentales por Incabloc®. El movimiento aporta 42 horas de reserva de marcha.


Efecto turbina
En 2009 patentó Perrelet la tecnología de la turbina, que fue diseñada con fines puramente estéticos. Está fabricada en aluminio anodizado negro y equipada con contrapesos bajo las palas que le permiten girar al menor movimiento de la muñeca y volver a su posición de reposo cuando se agota la energía cinética. Cuanto más rápido gira, mayor es la visibilidad de toda la decoración de la esfera interior. Un juego dinámico de una arquitectura tridimensional de compleja construcción.
