Hoy HYT nos presenta el reloj que se convierte en la excepción que confirma la regla que se había establecido desde su joven surgimiento: siempre dijeron que nunca harían una pieza clásica. Así que, por supuesto, han hecho una.
A Vincent Perriard, director ejecutivo de HYT, no hay nada que le guste más que explorar el vasto universo expresivo de la casa. Desde el primer día, la marca abre nuevas vías, experimenta, crea, inventa. Su principal motor es la innovación, con la que ha conseguido llevar todos sus modelos hacia cumbres que nadie sospechaba. Ahora HYT se encuentra en la cumbre. ¡La perspectiva era demasiado tentadora como para no echar la vista atrás a tres siglos de relojería!
“Nuestro ADN es y será el de la innovación fluídica”, dice Vincent Perriard, “pero eso no nos impide divertirnos con los códigos de la relojería tradicional. La diversión, la experimentación, el placer de sorprender… Después de todo, es lo que mejor se nos da”.
El primer HYT con acabados clásicos
¿Contemporáneo clásico o retrofuturista? El H2 Tradition es un reflejo de su nombre: una combinación de ambos. Es el primer HYT con acabados clásicos, grabados. El primer HYT con delicadas carátulas lacadas y con agujas azuladas.
El H2 Tradition mantiene los pies en el siglo XXI. Su expresión visual no deja de ser hidromecánica, gracias al capilar, cuyo fluido azul avanza por las horas.
Este está animado por los dos fuelles posicionados a ambos lados de las 6 h, desarrollados en 2013 para el primer reloj de la serie H2. El gen tradicional se expresa, por su parte, en el platino grabado con diamante, en la corona en forma de ojiva y en las agujas azuladas: HYT ha querido que sea clásico, legible, y ha recuperado una estética lo más sobria posible.
Respeto a los cánones estéticos de la alta relojería
Este equilibrio constante entre tradición y modernidad es más complejo de lo que parece. HYT ha tenido que modificar el diseño del calibre del H2. Objetivo: darle un aspecto más clásico de acuerdo con los cánones estéticos de la alta relojería.
El volante, por ejemplo, se ha colocado más en el centro y ha cedido su espacio a la esfera de los minutos. Este simple desplazamiento ha requerido revisar el diseño del movimiento, llevado a cabo una vez más por APRP, colaboradores históricos de HYT. La caja también se ha vuelto a trabajar y el protector de corona se ha eliminado, procurando siempre reforzar los códigos de la tradición relojera.
El acabado del H2 Tradition también ha supuesto varios ajustes. Para poder grabarlo con diamante en alpaca rodiada por los dos lados, el platino, por ejemplo, tuvo que hacerse más espeso, lo que requirió el cálculo de nuevas tolerancias del movimiento. Todos los puentes se han modificado, reconstruido, suavizado y achaflanado a mano.
El principal reto en el desarrollo de un HYT clásico fue conservar la identidad de la pieza al mismo tiempo que se le añadieron códigos que no eran los suyos, originalmente. Un reto plenamente superado.