La horología, así como el planeta y el tiempo no se detienen, apenas nos distraemos en alguna actividad cuando ya se hizo de noche, un producto ya se caducó o salió del mercado, ya no cumple con las expectativas o incluso notamos que ya no es necesario. Dicha evolución da paso a la siguiente generación, y así como en la naturaleza que deja caer su follaje durante el Otoño para dar paso a ramas y hojas nuevas, la vida del relojero también sufre de lo mismo.
Hoy en día Watches World se encuentra emocionado de poder compartir el inicio de un nuevo ciclo escolar en la relojería de Sajonia, que da comienzo después de la visión de Walter Lange por conservar los oficios y legarlos a las siguientes generaciones, y es que durante algunos años en plena crisis del cuarzo, la profesión de relojero dejó e recibir alumnos en sus aulas, pues el futuro era realmente incierto.
Hoy me atrevo a apuntar, a nombre de este medio, que la relojería mecánica no irá más a padecer de lo mismo, puesto que a la premisa se modificó y el valor de una pieza ya no reside en sus múltiples funciones, sino en la complejidad y el trabajo de artesanos virtuosos, y por ende, el arte.
Wilhelm Schmid, CEO de la Manufactura de Sajonia, está encantado de observar observar el creciente interés por parte de los jóvenes, y gracias a éste, da inicio un nuevo año de entrenamiento para los jóvenes y mujeres que desean trabajar de la horología sajona por los siguientes tres años. Lange construye relojeros desde 1997, y a partir de esta fecha, más de 100 aprendices de relojero, un grabador y siete fabricantes de herramientas han completado sus prácticas.
A partir de ya, cada uno de los seis hombres y catorce mujeres portará una bata blanca con el sello de A. Lange & Söhne, tiempo en el que aprenderán a desarrollar, reparar y ensamblar relojería, demostrando sus habilidades en los oficios inherentes a este tipo de arte.
«Tienen una magnífica educación y están muy motivados. En A. Lange & Söhne los aspirantes a relojeros se benefician de excelentes condiciones laborales en un edificio apartado que les garantizará empleo a aquellos que alcancen el primer o segundo lugar»: Wilhelm Schmind, CEO.
