Desde tiempos antiguos las esmeraldas han sido especialmente apreciadas dentro del mundo de la joyería. Su color de alta saturación verde o verde azulado les confiere una belleza excepcional que se distingue enseguida del resto. Su nombre proviene del griego smaragdos –piedra verde– y es una variedad del mineral berilio, en donde pequeñas cantidades de cromo y vanadio hacen posible que la esmeralda adopte su característico tono.
Para determinar el valor de esta piedra preciosa habrá que fijarse primeramente en el color, ya que las que tienen tendencia a verde azulado o a verde puso son las más anheladas. La forma más común de tallar la esmeralda es el famoso esmerald cut, un corte escalonado rectangular. Esto se debe a la forma de sus cristales.
Fue Egipto la ciudad que vio nacer las primeras minas de esmeralda en los años 3,500 AC. Grandes gobernantes como Cleopatra tenían una especial afición por ellas y es por ello que están estrechamente relacionadas con dicha cultura. La diva Elizabeth Taylor también adoraba este tipo de joyas, y recientemente se subastó un broche de 23.46 quilates que le perteneció a la actriz en donde se pagaron $280,000 dólares por quilate para sumar un total de $6,578,500 millones de dólares por la pieza.
Berger Joyeros sabe la importancia de este exclusivo tesoro y es por ello que tiene disponible una gran cantidad de diseños con esta piedra preciosa en aretes, anillos y collares entre los que recientemente destaca el corte gota montada sobre oro blanco o platino.
4 datos curiosos sobre la esmeralda
-La esmeralda es la piedra natal de quienes cumplen años en mayo.
-La piedra preciosa se usa para conmemorar los 20º y 35º aniversarios de boda.
-En el mundo existen cuatro piedras preciosas reconocidas internacionalmente: las esmeraldas, los rubíes, los diamantes y los zafiros.
-Generalmente, cerca de los depósitos de esmeralda también es posible encontrar cuarzo.
