El encanto del Art Déco revive con el Reverso Classic Monoface ‘Origin’ de Jaeger-LeCoultre
Jaeger-LeCoultre presenta una nueva interpretación de uno de sus íconos más admirados: el Reverso Classic Monoface ‘Origin’. Esta pieza femenina celebra la versatilidad y la elegancia eterna del diseño Art Déco que ha distinguido al…
Jaeger-LeCoultre presenta una nueva interpretación de uno de sus íconos más admirados: el Reverso Classic Monoface ‘Origin’. Esta pieza femenina celebra la versatilidad y la elegancia eterna del diseño Art Déco que ha distinguido al Reverso desde 1931.
Con proporciones refinadas –32.5 x 16.3 mm– concebidas especialmente para la muñeca femenina, el nuevo modelo rinde homenaje al primer Reverso Dame, una creación que definió una época y transformó la relojería en arte portátil.

De los campos de polo a la eternidad del diseño
La historia del Reverso comienza con un desafío. En los años treinta, los oficiales británicos que jugaban polo en la India pedían un reloj capaz de resistir los golpes del juego sin perder elegancia. Jaeger-LeCoultre respondió con una idea brillante: una caja que giraba sobre sí misma para proteger el cristal.
Así nació el Reverso, símbolo perfecto de equilibrio entre forma y función. Con el tiempo, aquel reloj deportivo se convirtió en un emblema de estilo adoptado tanto por hombres como por mujeres, sin perder su esencia Art Déco ni su caja reversible patentada (CH159982).

Inspirado en el primer Reverso Dame
El Reverso Classic Monoface ‘Origin’ recupera el espíritu de las primeras versiones femeninas creadas por La Grande Maison en los años treinta, que se lucían no solo en muñecas, sino también en colgantes y clips de bolso.
Sus dimensiones –idénticas al modelo de 1931– evocan la elegancia discreta y las proporciones clásicas que siguen cautivando a quienes valoran la sobriedad con carácter.
El acero pulido de su caja se complementa con una carátula de belleza atemporal: un guilloché central con motivo solar que fluye hacia una minutería tipo chemin de fer. Los números árabes transferidos se posan sobre una superficie satinada con un sutil cepillado vertical.
Está disponible con un brazalete de acero de cinco hileras o una correa de piel de aligátor azul, reflejo de la versatilidad contemporánea que distingue a Jaeger-LeCoultre.

Un lienzo para la personalización
En homenaje a los primeros Reverso, el fondo metálico liso del Monoface invita a la personalización. Su superficie puede transformarse con más de 1,880 opciones de grabado o lacado, convirtiendo cada pieza en una obra única que guarda una historia personal.





El Reverso Classic Monoface ‘Origin’ no solo marca el paso del tiempo, sino también la evolución del gusto. Un reloj que mira hacia el pasado con respeto y hacia el futuro con gracia.
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Rita Segura
Comunicóloga especializada en medios impresos y electrónicos. Escribir me apasiona tanto como la alta relojería con su preciso y encantador tic-tac.
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